HUMANIDAD

Somos una unidad, nuestra lateralidad es izquierda y derecha. Algunas personas son diestras, otras ambi diestras, otras zurdas. Si caminamos en una cuerda floja, tenemos que mantener el equilibrio para no caer. Los grandes genios en la historia nos narran sus descubrimientos basados en la observación, en la creatividad y surgen las preguntas; si utilizamos el sentido común, el pensamiento crítico. La concepción del mundo, las ideologías, el discernimiento entre el bien y el mal, a dónde nos está llevando como humanidad. Dónde quedó está unidad, este ser íntegro, dónde justifico la guerra, la opresión, el abuso, la corrupción, la destrucción, la impunidad, dónde encajan las ideologías cuando se confrontan estos hechos. Si no creo en un ser supremo, si nunca he leído la palabra y otros libros que hablan sobre los mismos temas, y no creo, no tengo fe, ¿Puedo aún así tener la capacidad discernir entre el bien y el mal y escoger lo correcto?. Creo que sí, si no no sería justo. Tenemos la oportunidad de escoger. Si vivimos en una cadena de errores, nos equivocamos al escoger o decidir, muchas personas en nuestro entorno se verán perjudicadas. Decidir lanzar bombas, traerá muerte y destrucción. Lo que en un momento era la foto de una familia o entorno feliz se convierte en una pesadilla. ¿Y por qué? Porque mi ideología es diferente, porque soy dueño de la verdad, odio a los que no piensan como yo, etc. ¿Por tradición? Lo cierto es que los siglos pasan y la humanidad no llega a humanizarse. Las ideologías han fracasado. Hasta que no nos demos cuenta que somos una unidad íntegra, que formamos parte de un gran grupo como seres humanos y trabajemos para construirla, no podremos evolucionar. Estaremos viviendo una eterna división, partiendo lo íntegro para que ganen los que están haciendo negocio destruyendo la vida, la tierra y la humanidad.